Demasiado bueno para ser real...- Matt Kowalski

Bueno, creo que tener que rodear la capital no era una buena idea, pero Hilda no es que ponga a pensarse mucho las cosas, lo que quería tener claro en ese momento era el no tener que gastar tanto combustible para buscar recursos, además de que pudiera robar algún calmante para evitar las alucinaciones, aunque había pasado mucho tiempo de las mismas, es patente que puedan salir de nuevo a la luz, Josh de nuevo mirándola agonizante cuando el cuchillo se hundió en el cuello, la sangre en sus manos otra vez, era una locura absoluta, una la cual no tenía ni la más pálida idea de cuando se iba a acabar , después de tanto tiempo quería decir que se había acostumbrado pero no…

Ni de cerca…

Empezó a llover y la motera tuvo que parar la moto cerca de un gran supermercado cercano, no quería meterse de lleno en la capital pues… realmente creía que la muerte ronda por la misma y no quería arriesgarse, solo tenía a mano su machete, además de la pistola que no tenía el cargador lleno pero… aun podía haber posibilidades para usarla y llevarse a unos cuantos caminantes con ella, y eso le bastaba, Hilda dejo la moto cerca, para poder escapar rápido, pensando que nadie podría robarla y… si alguien lo hiciera pues… que el infierno se congele si piense que no la iba a buscar.

Así que la mujer entro pro la ventana, teniendo cuidado de no cortarse con los vidrios rotos, no sabía si había infectados adentro pero… podría pasar cualquier cosa allí, era cuestión de ser cuidadosa, la mujer quería ver que podía encontrarse allá, sin miedo a ninguna criatura, hacía mucho que había estado vagando y sabía que el campamento necesitaba muchas cosas, la idea de estar mantenida por Umbrella le gustaba poco y nada, así que quería encontrar algo que sirviera, algo que fuera de utilidad, tal vez medicinas para su hermana, o alguna ropa.

Se alisto y empezó a trabajar, buscando entre esos estantes que podía encontrar de útil, después para volver, había mucho que hacer…

Había salido del refugio con su motocicleta pero está vez bien cargada de gasolina y aunque aún no podía creer todo lo que había estado pasando esos días. Se sentía diferente. Por supuesto que aún estaba molesto con Ashley por todas las mentiras y aún no confiaba en ella, pero se sentía más tranquilo de saber que estaba allí, que realmente nada le ha Is pasado y ¿por que no decirse  la verdad? También tenía sentimientos por ella, algunos que no podía controlar.

No tardó mucho en comenzar a llover pero Matthew continuo hasta que algo llamo su atención y no era el supermercado en si. Si no la motocicleta estacionada frente a este. Esa motocicleta no había sido abandonada, no tenía una capa de tierra así que estaba seguro que alguien estaba ahí adentro. Una parte de él le decía que era mejor no seguir buscando problemas pero la otra decidió que quizás la persona necesitaba ayuda.

A diferencia de la persona que estaba allí, el decidió esconder su motocicleta y bajo con el arma cargada. Intento entrar si hacer el menor ruido, cosa que no parecía hacer la persona que estaba allí adentro. Era como si quisiera llamar la atención de cualquier zombie que estuviera cerca.

Camino lentamente hasta un pasillo y allí la vio de espalda. Suponía que no se podía reconocer a una persona tan rápido pero su mente se llenó de recuerdos. Había confiado en ella por años, había sido su segunda al mando hasta que una noche había matado a uno de sus compañeros a sangre fría. Matt jamás había entendido que pasó, ella no había hablado con el y al final el tampoco le había vuelto a hablar -¿Hil? - pregunto mientras se mostraba por completo y bajaba el arma

Claro está que no lo esperaba pero en ese mundo nadie esperaba ver a las personas que conocía con vida. Por eso es que Matthew estaba tan sorprendido como ella. De toda su unidad, jamás hubiera esperado a verla a ella y quizás era un regalo porque cuando las cosas se habían puesto mal toda su unidad se había desarmado y el se había marchado con Ashley hacía el refugio de Atlanta, algo que aún pensaba que estaba mal pero ya no podía hacer nada por eso, el había perdido bla cabeza por una mujer que lo había engañado siempre y aunque en ese momento se habían vuelto a ver, la verdad es que no podía olvidar lo que había pasado.

Por una vez en mucho tiempo parecía que ambos habían olvidado el mundo en el que vivían porque el dejó que ella se acercara de manera suave y había bajado su arma. La siguió con la vista todo el tiempo hasta que ella llegó con el. Sintió como tocaba su mejilla y por un momento cerró los ojos, aquella mujer había sido parte de su familia en los momentos más oscuros de su vida u ahora estaba allí viva. -al menos lo que queda de mi- murmuró antes de abrir los ojos.

En el pasado se había sentido decepcionado de ella pero nada importaba mucho, ninguno de los dos era militar, la mayoría de su unidad debía estar muerta y las fuerzas armadas de estados unidos debían estar completamente destruida. Todos los pensamientos se arremolinaban en su cabeza y se pregunto que debía hacer. Quería preguntar ¿Por qué? Pero estaba seguro que ya no tenía sentido.

Así que sin pensarlo la atrajo hacia el y la abrazó -¿Cómo es posible?- murmuró y aunque se mantuvo en su lugar por unos segundos al final termino por hacerse para atrás y suspirar, estaba por decir una cosa cuando escucho un par de ruidos más y en seguida desenfundó su arma y casi como si no hubiera pasado el tiempo le señalo a donde venía el ruido, como si aún fueran una orden militar más

La voz de ella solo lo hizo más real. De alguna manera había vuelto a encontrarse con ella, podía recordar el pasado y todas las veces que ella había sido una parte importante no solo en las misiones sino en su vida, quizás por eso se había sentido tan molesto con todo lo que había pasado, no solo porque ella había lastimado a alguien de la familia sino que él podría haberlo evitado si ella hubiera mostrado un poco de la confianza que el había creído que se tenían. Pero en cambio había guardado el secreto y en una crisis había matado a un compañero

¿Podía decirle algo en este momento? La verdad es que no tenía sentada, todo se había ido a la mierda así que no, está vez solo quería disfrutar un poco de aquellos buenos recuerdos que guardaban juntos. Por eso cuando ella se acercó la abrazó con cariño. Por un momento deje de pensar pero al escuchar el sonido todo volvió a la realidad del presente.

Ambos nos pusimos en posición y se sintió tan natural como estar en casa. Ambos nos habíamos quedado en silencio cuando un par de hombres salieron por el pasillo, casi parecían sorprendidos al ver primero a Hilda -pero mira qué preciosidad- dijo uno mientras el otro sonreía -y yo que creí que no íbamos a encontrar nada divertido aqui- entonces sus ojos se posaron en mí, sabía que ella no estaba sola pero el otro hombre silbo y pude notar como algunos más entraban.

Estábamos rodeados y tenía que sacarla de allí, por lo general los supervivientes podía llegar a ser muy hostiles -no buscamos problemas- aunque no había bajado mí arma -si te parece bien ella y yo nos largamos, lo que encuentren aquí es suyo- era lo más amable que podía ser. Al menos hasta que lo vi negar, casi como si pudiera leer su mente sabía lo que querían de ella

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Sabía que no iba a a dejarlos ir tan fácil, podía verlo en el rostro de esos hombres dibujado, quizás hacía mucho tiempo que no veían a una mujer y creían que tenían el derecho a tomar lo que quisieran pero claro estaba que eso lo iba a pasar, no estaba dispuesto a dejar que nada que nada le sucediera a la rubia, sin importar lo que había pasado años atrás. Todo eso había quedado en el paso, algo que Matt había decidido en el mismo momento en que la había visto

Quizás el había decidido tratar de mantener la calma pero una parte de él sabía que ella no, aún recordaba lo letal que podía llegar a ser y casi quiso sentir compasión por aquellos idiotas que por una mala, muy mala decisión habían decidido creer que podían hacer algo con ella. Por alguna extraña razón en el rostro de Matt se dibujó una sonrisa, aquello le había traído viejos recuerdos.

No había sido casualidad que ella estuviera en su unidad, Matt mismo había pedido que ella se uniera, aunque jamás se lo había dicho y mucho menos después de lo que había pasado. Porque aquello lo hacía responsable a él directamente. Quizás por eso jamás le había vuelto a hablar porque el la había elegido.

Levantó una ceja al ver como ella lo cubría ¿Acaso se había olvidado quién era el? Matt jamás había necesitado protección pero supuso que había sido más instinto que otra cosa. Los movimientos de ella eran letales y no es que hubiera dudado de eso, sino que parecía mucho más agresiva que en el pasado donde se veía obligada a tener límites por el mismo ejército. El había creído ver algo bueno en ella pero ¿Se había equivocado?

Quizás estaba metido tanto en su furia que no noto que el otro hombre había sacado un arma, este le apuntó pero en cuanto Matthew dio el primer disparo de advertencia el hombre le apuntó a él lo que hizo que Matt le disparar a la altura del hombro y este cayera al suelo ¿Por qué nadie lo escuchaba? El hombre comenzó a suplicar que no lo maten y la verdad es que el no tenía intención de hacerlo pero no podía decir lo mismo de ella.

Bandidos
A3 - D3 - CF3 - D10

Quién sabe quiénes fueron tiempo atrás, ahora solo buscan sobrevivir y lo harán a toda costa. Son supervivientes normales, con la diferencia de que si te cruzas por su camino lo más seguro es que te roben y eso con la mayor de las suertes.

Pueden llevar chalecos y cualquier tipo de arma.

Spoiler:

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La vio sonreír y Me le devolvió la sonrisa porque por un momento recordó el pasado, aquellas veces que habían estado en el medio de una batalla y se habían salvado las espaldas. Porque su unidad no solo era eso, también eran una familia, había tantos buenos recuerdos de aquellos momentos que Matthew decidió no pensar en los malo, ya no era momento de reprocharlos.

El hombre que había quedado en el suelo no paraba de hablar y aunque tenía toda la intención de dejarlo allí, no estaba seguro que ella pensara lo mismo. Aunque Matt pensaba que debía calmarse no se movió de su lugar, aquellos hombres ha Ian amenazado su integridad física y solo ella podía decidir que hacer en ese momento. No estaba equivocada en pensar en las personas que ese hombre podía haber dañado pero Matt miro la forma en la que brotaba la sangre de su pierna, si ese hombre no sabía curarse bien, dudaba mucho que fuera a sobrevivir por la falta de sangre.

Cuando ella tomó la decisión de dejarlo marcharse el sonrió - no deberías preocuparte por mi- dijo acercándose a ella -vamos afuera, tengo algunos medicamentos y algo de primeros auxilios- lo bueno de viajar solo era que podía guardar cosas como esas. Por supuesto que aún no habían terminado de registrar el lugar pero le parecía mejor salir afuera, tendrían mejor luz y vista de cualquiera que pudiera acercarse.

Se acercó a ella y la tomo en brazos. -dejame curarte y quizás podamos ponernos al día ¿Estás sola?- sabía que habían varios refugios activos pero la verdad a él jamás le había interesado acercarse a ninguno, no al menos desde que ha Is sucedido lo de Atlanta.